Una selección de 10 experiencias que hacer en la Palma y que te ayudaran a exprimir al máximo tu tiempo en la isla más bonita de Canarias.
Si ya leíste nuestro anterior post sobre la isla de La Palma habrás podrido observar que es uno de nuestros rincones favoritos de España. Sólo tras visitarla te darás cuenta de lo afortunados que somos por tenerla tan cerca. Si ya te has decidido a recorrerla en este post encontrarás las 10 experiencias que no debes perderte. Recuerda que puedes reservar tus vuelos .directos desde Madrid con Iberia o desde Barcelona con Vueling, aunque puede resultar más económico volar con escala en el aeropuerto de Tenerife Norte y hacer un segundo trayecto de 30 min con Binter.
1. Subir al Roque de los Muchachos, la cima de la isla.
Se trata del Roque de los Muchachos, con 2.426 m. de altitud. Tranquilo, puedes hacerlo en coche a través de una retorcida carretera asfaltada.
Desde el aparcamiento puedes acceder a pie a cualquiera de los tres miradores habilitados. En los días despejados se pueden ver las otras tres islas de la provincia: Tenerife, La Gomera y El Hierro.
Junto a la cima verás repartida por los montículos que la rodean una de las baterías de telescopios más completa del mundo, incluido el mayor telescopio óptico e infrarrojo que existe. Se empezaron a colocar en los años 80 por las inmejorables condiciones que ofrece el cielo de la isla, separado de la contaminación lumínica por el mar de nubes que queda bajo estas cotas. Si quieres ver las instalaciones en las que trabajan nada menos que científicos de 17 países, debes reservar tu visita guiada con antelación. Cuesta 9 € y no permiten niños menores de 6 años ni mascotas.
Consejo: recuerda llevar abrigo porque la temperatura no tiene nada que ver con la de la costa.
2. Bañarte en alguna playa o piscina natural
Puede no sonar muy atractivo pero es una pasada. Como el oleaje y las corrientes hacen que las playas aptas para el baño escaseen, los palmeros han construido con gran inteligencia estas piscinas de agua de mar junto a las costas pedregosas. Son de fácil acceso, gratuitas y tienen todas las comodidades, por no hablar de un agua cristalina que invita a lanzarse nada más llegar.
Destacan las Piscinas de La Fajana y El Charco Azul en el noreste de la isla. En el suroeste y junto a la Playa de Echentive encontrarás varios charcos de aguas cristalinas con propiedades curativas. En estas últimas son salvajes y el acceso no es fácil pero merece la pena.
Consejo: no olvides llevar zapatillas de baño o escarpines, son todo rocas.
3. Llegar a la playa de Nogales
Decimos bajar porque desde el parking hasta la arena tendrás que seguir una senda y escalinata espectacular durante unos veinte minutos. La recompensa, una playa enorme de fina arena negra para ti y otros pocos valientes como tú. Al frente el océano y detrás un enorme paredón de piedra volcánica. El único inconveniente: el regreso implica volver a subir las mismas escaleras.
Consejo: es mejor visitarla por la mañana si quieres disfrutar de los rayos del sol, que desaparece tras el acantilado a eso de las cinco.
4. Conocer la impresionante naturaleza de La Palma
Los espacios naturales son el principal patrimonio de la isla y la variedad de rutas de senderismo es muy amplia. Simplemente tendrás que elegir la que por duración y dificultad se adapte a tus circunstancias. En la web oficial encontrarás todos los detalles.
Si no eres muy dado a largas caminatas hay media docena de senderos autoguiados que no pasan de los 2 km. Suelen estar en el entorno de los centros de visitantes de cada espacio natural.
Los senderos locales son más de veinte para elegir y su longitud no suele pasar de los 5 km. siempre con un grado de dificultad media.
Los más avezados podrán elegir entre los senderos de pequeño recorrido e incluso entre los dos de largo recorrido que rodean y cruzan la isla, lógicamente divididos en varias etapas.
Consejo: puesto que casi todas las rutas son lineales trata de hacerlas en sentido descendente, apoyándote en un servicio de taxi. Siempre hay taxis junto a las rutas más transitadas y tienen un precio fijo por plaza o por taxi. En el primer caso el taxista esperará a llenarlo hasta salir y en el segundo deberás frenar sus ganas de partir y conseguir otros viajeros con los que compartir la tarifa. Puedes ver las mejores rutas de senderismo en otro de nuestros post sobre La Palma.
5. Probar los platos típicos de la Palma
Si es tu primer viaje a Canarias debes familiarizarte con esta palabra: gofio. Se trata de una pasta de harina de maíz tostada, aunque también se puede hacer con otros cereales como trigo, centeno o incluso con quinoa. Cuenta incluso con su propio museo levantado en un antiguo molino del noroeste de la isla.
El Escaldón de gofio no es exclusivo de La Palma pero si ya lo has probado en Tenerife y otra isla siempre puedes comparar para decidir cuál es el mejor. Se trata de una cazuela con gofio, verduras y carne o pescado, incluso queso.
El queso palmero (D.O.) se fabrica con leche de cabra y se vende tras ser ahumado y salado con el producto de las salinas de Fuencaliente. Hay más de una docena de queserías y lo encontrarás por toda la isla. Recomendamos el de Llanomar por su sabor y porque además utiliza leche pasteurizada.
El ron se destila en la fábrica La Aldea desde 1936. Han innovado con nuevos productos y tiene un pequeño museo (2€) donde muestran el proceso de fabricación tradicional, aunque las explicaciones pierden protagonismo con respecto a la cata final, que es en lo que se centran. Si te gusta el dulce y pruebas el ronmiel estás perdid@.
Hablando de miel, en el norte la producen y venden desde generaciones en Ladera de la Reina, ganadora del premio a la mejor miel de Canarias en 2013.
Las carnes más típicas son las de conejo y cabra y como buena isla los pescados abundan en variedad y recetas por todo el territorio.
6. Conducir hasta el mirador de la Cumbrecita
Está situado dentro del Parque Nacional. De aquí parte una ruta de circular de 3,4 km entre el Mirador de La Cumbrecita, el Mirador de los Roques y el Mirador Pozo de las Chozas (1h 30′ aprox.). Se puede llegar en coche pero es obligatorio reservar el aparcamiento a través de esta web. La reserva es gratuita y puedes elegir la duración que quieras, pero calcula un mínimo de dos horas para hacer la ruta y tomar unas cuantas fotos. Deberás ser puntual porque si llegas 20 minutos tarde se cancelará tu reserva y te pondrán en una lista negra durante un año.
7. Disfrutar del atardecer en Poris de Candelaria
Uno de nuestros lugares favoritos en la isla en el que si tienes suerte podrás estar solo. La bajada en coche es una empanada de curvas con gran pendiente desde Tijarafe hasta un pequeño parking donde deben caber no más de 20 vehículos. Los coches de alquiler de gama baja se las verán y desearán después para subir a la carretera.
Desde aquí continua el zigzag pero a pie por una empinada cuesta. Al llegar te recibirán un puñado de antiguas casas de pescadores pegadas a la roca y al borde de un agua cristalina que invita al baño. Te recomendamos quedarte hasta el atardecer, primero por magia del lugar y el momento y segundo porque sólo sin el sol apretando de lleno en tu espalda podrás subir de nuevo hasta el coche sin maldecir la cuesta.
8. Adentrarte en un volcán
La Cueva de las Palomas, también conocida como Tubo Volcánico de Todoque, se formó con la erupción de 1949. Cuenta con un moderno centro de interpretación de construcción plenamente integrada en el paisaje cuya cafetería ofrece muy buena comida con vistas a un paisaje lunar. El acceso a la exposición y a un pequeño túnel bajo la misma es gratuito, sin embargo pasar a la cueva cuesta un mínimo de 20 € y debes reserva la experiencia en alguna de las empresas que la explotan, no en el propio centro. Se trata de una visita guiada de unos 90 min por los 560 m. (ida y vuelta) de la cavidad. La normativa vigente impide que haya más de 15 personas en el interior de la cueva a la vez, incluyendo guías, por lo que trata de reservar con antelación. No permiten niños de menos de 8 años.
La Palma Outdoor. Cobra 20 € y la enseña dos veces al día los martes, jueves y viernes.
Canary Live Experience. Idéntico precio. Entran los miércoles y sábados a las 10 y los viernes a las 16 h.
9. Callejear por Santa Cruz de la Palma
El casco histórico de la capital es pequeño pero está muy bien conservado y sería un pecado no dedicar una tarde a recorrerlo y disfrutar de una de sus terrazas.
El paseo entre la Plaza de España, donde se levanta la iglesia de El Salvador y el cercano Convento de la Concepción es un maravilloso recorrido por la arteria principal de la ciudad jalonada con casas señoriales. No olvides pasar al interior de la iglesia, cuyos techos de madera son una preciosidad.
Por cierto, este fue el primer Ayuntamiento de España donde se eligió a un alcalde por votación popular. Hasta entonces siempre los había designado la corona. No tardaron en destituirle.
En esta y otras localidades se pueden ver las mansiones que levantaron los Indianos. Aquellos emigrados a América que salieron pobres y retornaron ricos con la idea de mostrarlo a todo aquel que quisiera admirar sus opulentas residencias.
10. Visitar la Palma durante las fiestas
Lógicamente deberás hacerlo con mucho tiempo ya que los precios de los vuelos se disparan. Tienes dos grandes celebraciones anuales y otra para la que hay que esperar cinco años.
Los Indianos
Los indianos es, desde nuestro punto de vista, la más espectacular de las celebraciones. Tiene lugar únicamente en la capital durante el lunes de carnaval y se desarrolla desde las 10 de la mañana hasta que el cuerpo aguanta.
La fiesta como tal se basa en dos elementos desde los años 80: los polvos de talco y la parodia de los indianos que regresaban enriquecidos de Cuba. Sin embargo la tradición de celebrar la llegada de los barcos a puerto es del s. XIX y la de cubrirse con el talco parece heredada de las fiestas cubanas en las que se blanquean la piel. Pese a todo, la tradición popular habla de un cargamento de harina en mal estado que sirvió para batallar en el puerto hace más de 100 años.
El personaje principal de la fiesta es La Negra Tomasa, que llega en barco al puerto a eso de las 11 de la mañana y es acompañada por una comitiva al son de una conga hasta la Plaza de España donde miles de personas la esperan vestidos de riguroso blanco y con vestidos de época. A la una y media llega a la ya convertida en Plaza de la Habana en medio de una catarsis colectiva y una guerra de polvos de talco.
La Danza del Diablo
La Danza del Diablo se celebra durante la madrugada del 7 al 8 de septiembre en Tijarafe al noroeste de la isla. Alrededor de las dos y media de la madrugada el Diablo hace su aparición en Plaza de Ntra. Sra. de Candelaria, acompañado de gigantes y cabezudos y portando una estructura que despide fuegos pirotécnicos a diestro y siniestro. Sin embargo esto no parece asustar a los tijaraferos que se agolpan a su alrededor en un continuo ir y venir por la Plaza al son de la música y las explosiones.
Nuestra Señora de las Nieves y la Danza de los Enanos
Las fiestas de Nuestra Señora de las Nieves se celebran sólo cada cinco años desde 1945. Eso sí, para compensarlo duran nada menos que un mes. Sus principales eventos son los traslados de la imagen de la virgen y la Danza de los Enanos.
En la Romería de la Virgen de las Nieves su imagen es trasladada a la ciudad el segundo domingo de julio para hospedarse en la Parroquia de El Salvador. Permanece aquí hasta su día, el 5 de agosto, cuando es subida de nuevo a su santuario del monte.
La Danza de los Enanos es parte fundamental de las celebraciones desde 1905 y suele celebrarse el jueves de la Semana Grande en un recinto cerrado y posteriormente en la calle. Al inicio de la noche 24 hombres disfrazados con túnicas cantan en la Plaza de Santo Domingo. Estas personas han heredado esta tradición de sus padres y abuelos. También el secreto para tras pasar por una caseta situada en el escenario de la plaza, transformarse rápidamente en los Enanos de La Palma, con sus característicos gorros napoleónicos. En fila, aparecen de uno en uno saltando al ritmo de una polca centenaria interpretada por la banda municipal. Tras varias actuaciones en la plaza, los Enanos salen a la Calle Real donde continúan danzando hasta el amanecer.
Consejo: puedes comprar las entradas por internet con semanas de antelación. Los precios van de los 20 a los 30 €. Si tu visita a la isla no coincide con ninguna de estas tres grandes celebraciones puedes consultar en esta página las fiestas por meses y municipios.
Si estas pensando en visitarla pronto, echa un vistazo a nuestros viajes en grupo donde periodicamente tenemos salidas a este espectacular rincón de la geografía española.
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