Qué ver en LA GOMERA, 10 cosas IMPRESCINDIBLES

En España contamos con verdaderos tesoros de la naturaleza y si no eres nuevo en nuestro blog habrás descubierto que tenemos especial predilección por los que esconden las Islas Canarias, y hoy toca ver una isla de la que no hemos hablado mucho, la Gomera.

Es normal que las bautizaran como “Las Islas Afortunadas” principalmente por su favorable clima de eterna primavera, pero si le añadimos la gastronomía y el carácter generoso y hospitalario que han desarrollado de sus habitantes, el resultado es un destino casi perfecto para tus vacaciones. ¿Qué le faltaría? Umm... no se…¿Quizás una naturaleza exuberante, paisajes plagados de barrancos, roques y unas cuantas playas? Pues entonces no, no le falta de nada.

Si ya te has decidido a viajar a La Gomera en este post encontrarás las 10 principales experiencias que no debes perderte en tu viaje.

1. Conocer los miradores de La Gomera

La mayoría de los miradores que hay en La Gomera son accesibles en coche, que resulta sin duda la mejor forma de descubrir la isla. Algunos permiten ver las cumbres de las islas vecinas sobre un mar de nubes. Al este verás Tenerife y el Teide, con su cumbre imponente y al oeste el Roque de los Muchachos en La Palma. 

Empezamos por el techo de La Gomera, el alto de Garajonay a casi 1.500 msnm.

Su nombre viene de la leyenda que narra el amor entre la bella, Gara, natural de La Gomera y Jonay, un hijo de un jefe guanche de Tenerife, quien tras conocerla en un primer viaje con su padre y enamorarse perdidamente, cruzó de nuevo para huir con ella, atención, sobre dos pieles de cabra infladas. Teniendo en cuenta que la distancia entre las dos islas supera los 30 kilómetros no podemos más que admirar la resistencia del chaval…..y la calidad de las pieles. 

Le sigue en fama el mirador de Abrante, que ha sido “turistizado” con una más que “posteable” pasarela de cristal sobre el abismo (gratis) y un cuidado restaurante (no tan gratis). Las vistas son maravillosas en toda la zona, así que si no te apetece hacer cola para la foto siempre encontrarás otras perspectivas desde fuera del local.

Encontrarás mucha menos gente en el cercano mirador de Agulo. En el centro de la isla destacan el mirador del Morro de Agando y el mirador de Igualero. Son sin duda las mejores opciones para contemplar el Roque de Agando y la Fortaleza de Chipude de los que hablamos a continuación. dos elevaciones de piedra con formas muy diferentes pero con un significado especial para las tribus guanches. 
 

2. Subir a la fortaleza de Chipude

Hay dos montañas en La Gomera que causan gran impresión a simple vista. La primera es el Roque de Agando, un pitón volcánico de 80 metros de altura que nos recuerda a la película "Encuentros en la Tercera Fase".

Su formación se debe al taponamiento de un cráter hace más de cuatro millones de años. La espesa lava que salió de este cráter no avanzó por la ladera debido a su viscosidad y al rápido enfriamiento, así que se fue amontonando hasta taponarlo y formar el roque. Tendrás que conformarte con rodearlo porque su escalada se reserva a unos pocos elegidos.

La segunda es la Fortaleza de Chipude, una meseta de 300 metros de largo que se eleva por encima de los 1.200 msnm. lo que la hace visible desde La Palma. Debido a la gran cantidad de restos arqueológicos que han encontrado en la zona es fácil pensar que los gomeros la tenían por una montaña sagrada donde realizaban sus rituales. Lo mejor de todo es que se puede subir hasta la cima sin correr riesgo extremo de despeñamiento. Desde la carretera parte una senda de apenas un kilómetro y 125 metros de desnivel. No nos vamos a engañar, el mal estado de la misma hace que no sea para cualquiera, pero somos aventureros ¿o no? 

3. Visitar el parque nacional de Garajonay

Qué mejor forma de celebrar el cuarenta aniversario del parque de La Gomera que visitándolo. El parque protege el 10 % de La Gomera y casi todo su territorio está cubierto por monteverde.

Al igual que en La Palma y en menor medida Tenerife, La Gomera cuenta con varios bosques de la famosa laurisilva canaria. Es casi de locos pensar que este era el tipo de bosque que cubría la zona mediterránea hace 20 millones de años, antes de que llegaran las glaciaciones. Como en las partes elevadas de la isla llueve lo suficiente y no se producen heladas la vegetación formada por helechos, tilos, brezos, hayas se cubre de musgos y hiedra dejándonos un paisaje de cuentos de hadas. 

A nuestro juicio las mejores rutas dentro del parque nacional de Garajonay son las que recorren íntegramente por este paisaje verde cubierto en ocasiones por una bruma mágica. Existen varios senderos de pequeño recorrido que no te dejarán indiferente: Las Creces, Cañada de Jorge, Raso de la Bruma, Chorro del Cedro o Reventón Oscuro.

4. Disfrutar de las playas de La Gomera

Que la isla tenga muchos sitios que ver no implica que no podamos relajarnos sobre la arena al son de las olas. Las mejores playas de la Gomera se encuentran en la costa oeste, ya que al norte el oleaje y las corrientes son tremendas y al sur predominan los acantilados.

 La zona más destacada es la de Valle Gran Rey con su playa de Vueltas, protegida por el rompeolas del puerto y la playa principal con su típica Avenida Marítima y todos los servicios. Desde la localidad y caminando apenas un kilómetro existen dos playas solitarias.

Hacia el sur la Playa de las Arenas, aunque actualmente (diciembre 2020) el camino está cortado por los desprendimientos que ha sufrido el camino que lleva a la misma. Hacia el norte nuestra favorita, la playa del Inglés, poco concurrida y de una fina arena volcánica. 

En el noroeste está la Playa de Alojera. ¡Ojo! Es de piedras y está al final de una carretera infernal, pero apenas la rodean una decena de casas y un restaurante.

En el norte de la Gomera destaca la playa de Vallehermoso, resguardada al ser una cala. Si el mar no está bueno, que es lo más normal, siempre podrás bañarte en la gigantesca piscina triangular (gratis) que se han construido los paisanos. 

5. Deleitarse con la gastronomía de La Gomera

La gastronomía gomera es variada y contundente. Como dice un amigo canario, si no te gusta lo que comemos aquí es que no eres de fiar. Destacan los siguientes platos:

• El Escaldón de gofio (pasta de harina de maíz tostada) no es exclusivo de La Gomera pero si ya lo has probado en Tenerife o La Palma siempre puedes comparar para decidir cuál es tu favorito. Se trata de una cazuela con gofio,carne, pescado, verduras y queso. Lo mismo sucede con el potaje de berros.
• El almogrote, es una crema hecha con queso curado, pimienta picona, ajos, aceite y sal. Se utiliza como aperitivo untado en pan y sus tarros son probablemente el recuerdo más comprado por los peninsulares.

Y atención al postre típico, el frangollo. La textura en la que lo hemos visto es variada, a veces parece más un flan y otras un pastel, aunque suele ser como una masa de harina de maíz (o millo molido) a la que se añaden huevos, leche, azúcar y se adereza con cáscara de limón, canela, almendras y pasas. Es el postre típico que se prepara en las romerías y fue importado de América por los emigrantes retornados. De hecho en países como Chile siguen utilizando el término para referirse al cereal molido y en otras partes es sinónimo de revoltijo. 

Otros postres llevan  como ingrediente el guarapo, que se produce en La Gomera desde hace siglos. Se trata de la savia de palma una vez cocida a fuego lento. Suena sencillo pero para obtener un litro de guarapo hacen falta unos ocho de savia cruda que para colmo sólo se puede extraer cada cuatro años. Es utilizado para acompañar a los plátanos, la textura es como la miel y hasta en flan la hemos llegado a ver. En su forma líquida constituye una bebida dulce bastante refrescante.

6. Bañarte en la piscina natural de Hermigua

Como ya hemos dicho antes la costa norte no es apta para el baño ya que las fuertes corrientes y el oleaje han causado más de una desgracia. Los habitantes de Hermigua encontraron la solución con una gran piscina natural de agua transparente construida entre las rocas volcánicas.

¿Podría ser más sugerente? La respuesta es sí. La piscina tiene vistas a un gigantesco pescante abandonado hace más de 60 años. Del pescante original, inaugurado en 1908 sólo queda parte de la estructura. Sirvió para la exportación de frutas, ya que por entonces la carretera insular no existía y esta era la única forma de sacar los productos del norte de la isla hasta los barcos de gran calado. 
Aunque no te apetezca el baño, es uno de los mejores lugares que ver en la isla y de los más fotogénicos. 

7. Admirar el paisaje de Bancales

Más de un tercio de La Gomera está ocupada por bancales. Son el resultado de siglos de transformación de sus tremendos barrancos en zonas aptas para el cultivo de la vid, el plátano o el tomate. De aquí surgió la profesión de pedrero, ya casi extinguida, y que consistía en esculpir y colocar las piedras de tal forma que sujetaran el peso de la tierra del bancal superior. 

Llegarás a acostumbrarte a este paisaje de terrazas, pero si en algunas laderas te paras a pensar el esfuerzo necesario para poder transformarlas al completo, teniendo en cuenta la pendiente a la que se enfrentaban y la durabilidad que han demostrado, te entrará un sudor frío como nos ha pasado a nosotros más de una vez. 

Para poder bajar más rápidamente por estos bancales, los habitantes de Canarias desarrollaron una especie de pértiga que cambia de nombre y longitud dependiendo de la isla. En La Gomera se conoce como astía y llega a los 4 metros de longitud, de los cuáles sólo los últimos 20 centímetros son de metal. El brinco que dan los pastores entre terraza y terraza es conocido como salto del pastor y hay varias empresas que ofrecen la experiencia de intentar imitarlo. 

8. Atravesar los barrancos de Guarimiar y Benchijigua.

No es una ruta de senderismo apta para todos los públicos, requiere un estado de forma aceptable, pues en total son 15 kilómetros con unos 1.000 metros de desnivel acumulado. Si es un día caluroso conviene madrugar ya que la sombra brilla por su ausencia.

Lo bueno es el paisaje y la tranquilidad, ya que apenas se cruzan un par de caseríos donde lo más fácil es no encontrar a nadie. Puedes recorrerlos de sur a norte desde Pastrana hasta el mirador de los Roques o viceversa.

Si no te ves con fuerzas para hacer toda la ruta puedes aparcar en el caserío conocido como “Lo Del Gato” e internarte lo que consideres hacia Benchijigua (dirección norte) o Guarimiar (sur) regresando después sobre tus pasos. 

En esta web encontrarás esta y otras muchas rutas, ordenadas por longitud y tipo.

9. San Sebastián de La Gomera

Estamos de acuerdo en que no es la más bonita de las capitales canarias pero tiene una historia que no nos podemos saltar. Actualmente la capital de La Gomera cuenta con menos de 9.000 habitantes, aunque suponen casi la mitad del total de la isla. Sus coquetas casas de colores y los típicos balcones y ventanas de madera bien merecen un paseo y que te sientes en una terraza a dejar pasar el tiempo y disfrutar del ritmo pausado de los isleños.

Desde su puerto salió Colón en su primer viaje a lo que él creyó que eran Las Indias.  De aquella época sólo queda la Torre del Conde, la única que se conserva de todas las levantadas por los castellanos para poder conquistar la isla a los gomeros. 

Destaca también la iglesia de la Asunción, que guarda varias sorpresas en su interior. La primera una virgen con origen en Flandes, fruto del intercambio que surgió con la exportación del azúcar de La Gomera al norte de Europa. En la isla llegaron a existir cinco ingenios azucareros.

La segunda, una talla cubana de Santa Teresa del 1675, traída en uno de los muchos viajes a América en los que La Gomera hacía de escala obligada. Y la más importante la capilla del Pilar. Su techumbre de madera y los frescos de las paredes recordando la batalla contra el pirata inglés Windham en 1743 son dignos de admiración. 

10. Escuchar una demostración de Silvo gomero

Lo has tenido que ver en algún documental de la 2. Los pastores de La Gomera desarrollaron un curioso sistema de comunicación a base de silbidos para poder comunicarse a través de los barrancos forman la isla. 

Los silberos, que llegan a entenderse a varios kilómetros de distancia, transforman en silbidos el castellano, por lo que pueden decirse cualquier cosa. Se piensa que ya utilizaban este sistema antes de la llegada de los castellanos, transformando entonces el idioma guanche. 

Actualmente el silbo está protegido por la UNESCO, que lo incluyó en la lista del Patrimonio inmaterial de la Humanidad y se enseña en los colegios de La Gomera. A lo largo del año se imparten talleres de todos los niveles e incluso una cátedra, se dan exhibiciones públicas y también privadas muy ligadas en el Parador de Turismo y algunos restaurantes.

¿Cómo llegar a la isla de La Gomera desde Tenerife?

Lamentablemente, o quizá por suerte, no hay vuelos directos desde la Península, pero tranquilo, tienes dos opciones para llegar desde Tenerife.

1. Llegar en barco a La Gomera.

Volando a Tenerife y desplazándote en guagua al Puerto de Los Cristianos. Si aterrizas en Tenerife Norte necesitarás más de una hora en bus. En cambio desde Tenerife Sur sólo son 15 minutos y hay una guagua cada media hora durante todo el día. Desde el puerto parten al menos 5 barcos al día y el trayecto es de tan sólo 50 minutos. El coste del billete parte de los 36 € por trayecto. 

Este barco también suele continuar a Playa Santiago, al sur de la isla y junto al aeropuerto.

2. Llegar en avión

Desde Tenerife Norte o Gran Canaria con Binter.Todos los días hay dos cortos vuelos de 30 minutos (uno por la mañana y otro por la tarde) mientras que desde Gran Canaria sólo se puede volar los viernes y domingos. Una vez en el aeropuerto de La Gomera la guagua 7 te lleva a la capital, aunque ten en cuenta que el trayecto es de más de una hora.

Por lo tanto deberás elegir la forma de llegar en función de los precios y las conexiones con el segundo vuelo o el ferry, aunque creemos que el gran condicionante es tu aeropuerto de llegada a Canarias.

Si llegas a Tenerife Norte no tiene sentido cruzarte la isla entera pagando 12 € de guagua para buscar un barco salvo que los billetes de Binter estén por las nubes o tengas que esperar muchas horas para el vuelo de la tarde. Y por el contrario si aterrizas en Tenerife Sur lo mejor es ir al cercano puerto en lugar de cambiar de aeropuerto salvo que hayas conseguido una ganga en los billetes.

Desde Gran Canaria hay vuelos directos los viernes y domingos por si te apetece visitar esta isla antes o después y te cuadra el calendario.
Recuerda que aquí puedes reservar tus vuelos o alquilar un coche para tu viaje a La Gomera.

¿Cuántos días son necesarios para visitar La Gomera?

Si vas a viajar por libre a la Gomera y buscas información turística verás que algunas empresas ofrecen una excursión a La Gomera en un día. Son viajes organizados desde el puerto de los Cristianos en Tenerife que apenas permiten ver San Sebastián de la Gomera, unos cuantos miradores y realizar una actividad en una plantación o con el silbo gomero, aunque si no tienes tiempo son una muy buena opción.

Desde nuestro modesto punto de vista la isla ofrece muchas cosas interesantes para ver y hacer y ni siquiera podrás hacer todas en dos días. Lo mínimo, para que tus vacaciones en La Gomera sean completas y te permitan disfrutar bien de las bondades que ofrece es que visites La Gomera en 4 días.

Esperamos que hayas disfrutado de nuestro top de experiencias en La Gomera. Recuerda pasarte a echar un vistazo por nuestra web, donde periódicamente realizamos viajes en grupo a esta isla y otras islas de Canarias.